Si hay un alojamiento emblemático en las lagunas, donde el cliente es el protagonista, ese es el Hotel Albamanjón. Situado a orillas de la Laguna de San Pedro es realmente un espectáculo para disfrutar de una estancia especial en el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera.
Las habitaciones, todas diferentes, escalonadas en el cerro y con vistas a la laguna, son una auténtica delicia. Ahora en invierno apetece encender la chimenea, y con el buen tiempo, salir a sus terrazas y por ejemplo tomar allí el desayuno, o bien, tumbarnos para escuchar el silencio del valle. Son amplias, confortables y algunas con jacuzzi. Y sobre todo muy bien atendidas.
De su restaurante destacaría su cordero, excelente materia prima trabajada, y una variada carta para picar en un entorno espectacular y un servicio muy correcto. Y porque no terminar la velada en su cafetería con vistas a la laguna, relajación y buen ambiente.
Hospedarse en Albamanjón es una experiencia que nos ayuda a descubrir la esencia del Parque Natural y si además le añadimos a nuestra escapada la realización de alguna actividad según nuestros gustos: naturaleza, náuticas, deportivas o buceo con ruideractiva, la experiencia se convierte en un homenaje para nuestros sentidos que siempre mantendremos en el recuerdo.
Para más información www.albamanjon.net y www.ruideractiva.com
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